"Es que la visión que presentan, que a mí me causa rechazo (y lo siento que sea visto como hipocresía) es que se ASUME LA INCOMPATIBILIDAD entre el éxito profesional y la maternidad. Por eso se posterga de forma "artificial", porque si no no se hablaría de postergarlo hasta alcanzado un punto. Entonces se perpetúa la incompatibilidad, se asume que es incompatible. Y sigue habiendo modelos de éxito de mujeres que no tienen hijos (se entiende que son un estorbo hasta alcanzado un cierto nivel), que se permiten tenerlos llegado un punto. Se asume que la pasión por el trabajo y los hijos son incompatibles. Esto es lo llamativo y es lo que me causa rechazo. Se leen aquí cosas tan tristes como que una mujer de esas grandes ( y lo digo sin ningún sarcasmo), no quiere que se note que da pecho en su trabajo. No es que se plantee no darlo por no rendir, no es que afecte a su capacidad profesional. Es que no quiere que se le note (no quiero tampoco que se le note, vaya, me duele que se plantee que eso la perjudica, no en su rendimiento, sino en su visión como profesional) No quiero que los hombres manejen el cotarro ni mucho menos. Pero se asume un modelo de incompatibilidad entre vida personal y vida laboral exitosa en el que no quiero vivir. Y eso no quiere decir que me escuezan las mujeres grandes, ni la ciencia. Es bastante demagógico deducir eso."
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